Hasta pronto, hasta siempre
Publicado por
Play
on miércoles, 28 de septiembre de 2011
Etiquetas:
Gato Negro,
La inspiración dormida,
Los colores olvidados
/
Comments: (0)
Queridos lectores,
No os preocupéis por el título de esta entrada. Ese hasta pronto, hasta siempre no es una despedida. Tenéis a Gato Negro para rato. Esas palabras van dedicadas a este blog.
Este felino aunque viva en el mundo de los cuentos y la imaginación siempre está muy atento a las novedades y hace tiempo que tenía ganas de darle un cambio de imagen, una limpieza de cara a este rincón. Por eso, a partir de ahora nos encontraréis aquí.
Este blog continuará vigente porque hay muchas historias y comentarios que no queremos que se pierdan, pero todas las novedades sobre Los colores olvidados y La inspiración dormida estarán presentes en el nuevo blog. Más bonito, con más diseño, más moderno, pero con el espíritu de siempre: explicaros las anécdotas, detalles e historias que se esconden en cada libro. ¡Os espero allí!
Palabra de Gato Negro.
PD: A todos aquellos que teníais el blog linkado en vuestro propio rincón del ciberespacio, por favor, acordaros de poner el nuevo link para así no perderos ninguna entrada.
El origen de la alianza
Publicado por
Play
on jueves, 8 de septiembre de 2011
Etiquetas:
Cuento del lunes,
La Alianza,
La felicidad está muy cerca,
No creo en la mala suerte,
Porque yo lo galgo,
SOS Galgos
/
Comments: (2)
En la línea de rescatar el origen de los relatos, hoy nos toca descubrir La alianza. En este caso, el relato surgió de la mezcla de dos diseños de camisetas: una que vio la luz con bastante éxito y la otra que quedó relegada a los anales ocultos de la historia de Play Attitude.
En el caso de La alianza, tenía muchas ganas de rendir honores a los indios norteamericanos por su honda sabiduría y por ser reflejo de esa unión con la madre tierra que hemos ido perdiendo en nuestra sociedad actual. Pero no podía olvidar las camisetas y, por eso, surgió la historia de ese lobo, en realidad, un can que nos recuerda que hay vínculos que deberíamos afianzar como la relación con los animales.
Una de esas camisetas en las que se inspiró, apoyaba a la ONG SOS Galgos que ayudan a los perros de esta raza a encontrar un hogar. Apoyándome en esa camiseta, con un lema tan llamativo como el Porque yo lo galgo, os dejo con el microrelato que surgió de esa camiseta y que, posteriormente, nos llevaría a crear La alianza:
"De porte elegante y postura erguida, el galgo acompañaba a los antiguos dioses del Olimpo. Todos admiraban su pose majestuosa, digna de cualquier habitante de aquellos lares, y, especialmente, su velocidad. Aquel animal era capaz de correr más allá de la marcha normal de cualquier mortal. ¡Incluso de los omnipotentes dioses! Por eso, Hermes, el mensajero, que se jactaba de ser el más rápido del Olimpo no quiso competidor. Aprovechando sus poderes de hijo de papá –de papá Zeus, claro está-, Hermes castigó al galgo, convirtiéndolo en animal de cacería en la Tierra. Y a su ventura lo dejó por los siglos de los siglos. El galgo pasó a ser víctima de los humanos, quiénes lo condenaron a vagar por campos entre cacerías y sangrías. Sin embargo, aún había esperanza y algunos humanos convertidos en héroes se apiadaron de tan especial animal y le permitieron entrar en su hogar, rescatando a los galgos de las fechorías de los insensatos y devolviéndoles la dicha que les habían robado".
Y en Play somos tan pro animales, que no es el único diseño de la colección donde en una camiseta lucen afortunados gatitos (No creo en la mala suerte) y sabios perretes (La felicidad está muy cerca).
Quien haya tenido la fortuna de convivir con algún perro o gato o cualquier otro animalillo doméstico, sabrá cuánto nos enseñan, casi sin darnos cuenta, pero sobre todo, cuánto cariño nos regalan. Ahora nos toca a nosotros devolvérselos. Ahora nos toca volver a establecer esa alianza, ¿no creéis?
En el caso de La alianza, tenía muchas ganas de rendir honores a los indios norteamericanos por su honda sabiduría y por ser reflejo de esa unión con la madre tierra que hemos ido perdiendo en nuestra sociedad actual. Pero no podía olvidar las camisetas y, por eso, surgió la historia de ese lobo, en realidad, un can que nos recuerda que hay vínculos que deberíamos afianzar como la relación con los animales.
Una de esas camisetas en las que se inspiró, apoyaba a la ONG SOS Galgos que ayudan a los perros de esta raza a encontrar un hogar. Apoyándome en esa camiseta, con un lema tan llamativo como el Porque yo lo galgo, os dejo con el microrelato que surgió de esa camiseta y que, posteriormente, nos llevaría a crear La alianza:
"De porte elegante y postura erguida, el galgo acompañaba a los antiguos dioses del Olimpo. Todos admiraban su pose majestuosa, digna de cualquier habitante de aquellos lares, y, especialmente, su velocidad. Aquel animal era capaz de correr más allá de la marcha normal de cualquier mortal. ¡Incluso de los omnipotentes dioses! Por eso, Hermes, el mensajero, que se jactaba de ser el más rápido del Olimpo no quiso competidor. Aprovechando sus poderes de hijo de papá –de papá Zeus, claro está-, Hermes castigó al galgo, convirtiéndolo en animal de cacería en la Tierra. Y a su ventura lo dejó por los siglos de los siglos. El galgo pasó a ser víctima de los humanos, quiénes lo condenaron a vagar por campos entre cacerías y sangrías. Sin embargo, aún había esperanza y algunos humanos convertidos en héroes se apiadaron de tan especial animal y le permitieron entrar en su hogar, rescatando a los galgos de las fechorías de los insensatos y devolviéndoles la dicha que les habían robado".
Y en Play somos tan pro animales, que no es el único diseño de la colección donde en una camiseta lucen afortunados gatitos (No creo en la mala suerte) y sabios perretes (La felicidad está muy cerca).
Quien haya tenido la fortuna de convivir con algún perro o gato o cualquier otro animalillo doméstico, sabrá cuánto nos enseñan, casi sin darnos cuenta, pero sobre todo, cuánto cariño nos regalan. Ahora nos toca a nosotros devolvérselos. Ahora nos toca volver a establecer esa alianza, ¿no creéis?